Uno de los muchos detalles que vemos en las películas americanas y que son radicalmente diferentes de nuestra experiencia son las típicas (en las películas y series) Ferias de Ciencia del colegio o instituto de turno.
Aunque hay un tópico recurrente que es el modelo de volcán, normalmente tarea a realizar por los más pequeños, en otros eventos podemos ver como los estudiantes se afanan por presentar trabajos con una cierta dosis de ingenio o con un duro esfuerzo de recopilación de datos detrás.
Hay varios factores propios del sistema de vida americano implicados en estos certámenes. Uno es sin duda el espíritu de competitividad, la necesidad de exhibir los propios logros y superar a los demás. Pero el otro es una reverencia por el sentido práctico que se manifiesta desarrollando de forma práctica los conocimientos adquiridos o descubriendo soluciones prácticas para problemas, en dificultad proporcional al nivel del aprendiz.
En España podría apuntarse como embrión de esta tendencia a lo práctico los «Trabajos de Investigación» de Bachillerato. Creo que no son comunes fuera de Cataluña (Treball de Recerca) donde se desarrollan por los estudiantes durante sus dos años de bachiller y supone u 10% de la nota del ciclo, que influye por tanto en la nota de selectividad.
En estos trabajos no es oro todo lo que reluce. Lo ideal seria que el alumno pudiera desarrollar un proyecto en el que demostrase la asimilación de conocimientos mediante un trabajo sobre todo original. No se trata de hacer descubrimientos para el Nobel, sino ‘descubrimientos’ para el nivel de conocimiento del alumno, pero sobre todo, de explorar, asumir y practicar el método de trabajo científico: recopilación de datos, formulación de teorías, realización de experiencias, extracción de conclusiones.
Desgraciadamente por diversos motivos son muchos los trabajos que se hacen siguiendo los dos o tres modelos estándar que hay en el instituto, iguales a los hechos por alumnos de otros años de forma que los profesores no tiene que molestarse demasiado para corregirlos o trabajos que son una mera recopilación de datos que no ha llevado al alumno más allá de la biblioteca. Se supone que la selección y resumen de información es una tarea habitual del estudiante, no un trabajo extraordinario y mucho menos un trabajo original o ‘de investigación’ porque lo que estamos diciendo es que el denostado ‘refrito‘ (segunda acepción) es admisible como animal de compañía.
Estimular el ingenio, el sentido práctico y la búsqueda de soluciones eficaces es el mejor medio para ver graduarse a promociones de profesionales competentes y de científicos punteros que son los que crearán riqueza, alcanzarán altas cotas de competitividad y en definitiva mejorarán la calidad de vida de la humanidad. Por eso, aunque siempre hemos pensado que los americanos son un poco bobos o incultos, resulta que ellos han llegado a la Luna y nosotros no. Las maquetas de volcanes deben tener su importancia.