En un mensaje que leí en Mastodon, preguntaban si alguien sabía de frascos para llevar perfume que no se derramen ni tengan pérdidas e insistía mucho en qué no le interesan las opiniones o las indicaciones no constatadas. Como quizás mi respuesta iba a encajar con sus necesidades, decidí no comentar, pero seguí las respuestas de la conversación porque yo me había planteado una pregunta similar para poder viajar con tinta de repuesto para las plumas que recargo desde tintero.
Luego he perdí la pista del mensaje y con los pocos datos que había guardado y gracias a la ayuda de asturel@tkz.one lo he vuelto a encontrar así como algunos datos interesantes.
Comprar por internet tiene algunas ventajas y también inconvenientes. Uno de ellos es no ver y tocar el producto antes de comprar. Las fotos, a veces, no dan idea incluso de aspectos muy concretos, como el tamaño. Así que sobre otras cosas como la estanqueidad suele ser difícil hacerse una idea.
Tuve que resolver ese problema para transportar tinta, un líquido con el que los experimentos son más arriesgados que con el perfume.
Hay muchos envases que «parecen» o se anuncian como herméticos, pero no es lo mismo el hermetismo necesario en un tintero de sobremesa que el que ha de viajar en una maleta sujeta a las volteretas propias del trasiego en un aeropuerto.
Cuando preparé mi viaje a Argentina tuve en cuenta que dada la duración del viaje, tendría que pensar en reponer la tinta de las plumas.
Para las plumas de dibujo elegí llevar cartuchos. Por suerte hay cartuchos de la misma tinta que normalmente uso de tintero, Platinum «Carbon Ink». Mi pluma es una Sailor «Profit» y por desgracia, no es compatible con esos cartuchos.
Lo solucioné añadiendo al equipaje una pluma Platinum «preppy» sin estrenar, compatible con los cartuchos. Cuando se acabo la tinta de la Profit abrí el cartucho para colocarlo en la «preppy» y le saqué tinta con una jeringuilla para rellenar el convertidor de la otra. El sistema funcionó, no tuve problemas con la tinta negra y usé las dos plumas (diferentes plumines) para dibujar.
Para escribir llevaba una Platinum «Prefounte» entintada con tinta Jacques Herbin «Blue Myosotis». Compré hace un tiempo una botella de medio litro a un precio fantástico, pero necesitaba algo más pequeño para los viajes.
Estudié el tema con varias pruebas de las que luego guardé testimonio en un pequeño cuaderno (12x12cm) que uso para notas, ideas y dibujos y que es una especie de «cuaderno de temas comunes» más que un cuaderno de bocetos como los otros que uso para dibujar.
Los botes de mermelada diminutos son curiosos. Al cerrarlos con mermelada caliente, se ponen al revés y al enfriarse, la contracción del aire en su interior hace el vacío y sella la tapa. Pero cerrados en seco su estanqueidad puede no ser perfecta y cuando los he usado para transportar agua para las acuarelas me han dado problemas, especialmente si han sido reutilizados varias veces.
Los tubos de muestras los uso para enviar tinta en intercambios con otros aficionados, pero siempre los sello con cinta adhesiva y los envuelvo en papel absorbente para prevenir alguna posible pérdida. Me parecieron pequeños.
El siguiente frasco lo encontré un bazar y compré una caja de 20 a buen precio. Los uso a veces para guardar restos de mezclas de tinta, pero la tapa es poco hermética ya que no dispone de ningún tipo de junta de estanqueidad.
Por último tenía un pequeño frasco procedente de la cocina y que había contenido esencia de vainilla o alguna cosa similar. El tapón de plástico entraba a presión y me pareció seguro.
Después de un concienzudo lavado hizo conmigo -en cabina- el viaje a Buenos Aires y regresó sin incidentes. Y luego me acompañó a Murcia. He recargado un par de veces un cartucho universal que uso con el adaptador en la Prefounte y aún queda tinta.
Yo no tenía ni idea de donde encontrar más frascos como este. Siguiendo la pista del mensaje mencionado, encontré algunas respuestas como la de NebelRebel que lo mencionaban como «viales» y la tienda que los vende en Barcelona, Torrero Vidre con lo que finalmente mi curiosidad me ha llevado a una solución concreta y práctica: Este es el tintero de viaje idóneo y la comparto con vosotros, esperado que también os sea de utilidad.