Leo a través de Slashdot que recoge la noticia del New York Times y de la publicación oficial Army Times, que el Ejército americano ha estado haciendo un experimento al proponer que los manuales militares puedan ser escritos y modificados por cualquier miembro de la organización, sea soldado o general.
El germen de la idea es que las cuestiones doctrinales cambian tan rápidamente que quizás sea mejor escuchar a los que tienen experiencia directa en combate que esperar a que doctos académicos y sesudos profesores de centros militares digieran la información y saquen sus conclusiones. Eso acortaría el ciclo de generación de doctrina a límites jamás vistos.
Y lo realmente anecdótico de este proceso es que se realiza mediante la aplicación Media Wiki, una aplicación Open Source y que es el mismo software que usa la Wikipedia.
Por lo demás el proceso no comporta excesivas novedades, aparte de un novedosos sistema de recoger sugerencias y plasmarlas rápidamente. Por supuesto Media wiki registra todos los cambios conservando las versiones anteriores, de forma que si una aportación no es considerada interesante por los supervisores del sistema puede ser desestimada para volver a la versión anterior.
Para participar en la iniciativa hay que tener un ID de acceso a la web del Army, asi que por descontado, queda registrado quien realiza la aportación, de forma que aunque ‘cualquiera’ puede aportar sus ideas, nadie puede hacerlo de forma anónima. De hecho según declaraciones de los responsables del experimento que se ha extendido a lo largo de varios meses, este solo ha tenido un éxito moderado, lo que seguramente quiere decir que el numero de sugerencias no ha variado en gran medida de las que se reciben por los cauces tradicionales.
Como conclusión si que creo importante destacar la necesidad de buscar continuamente formas de aplicación de las nuevas tecnologías. Hubo un tiempo en que se hablaba de la importancia de escribir las hojas de servicio y otros documentos a mano, para garantizar su pulcritud y autenticidad, o de firmar con pluma y no con bolígrafo. Hoy hay quien seguiría con manguitos y visera, son los que recomiendan el uso de aplicaciones propitarias o de sistemas operativos de empresas multinacionales con la excusa de que «los usa todo el mundo» en lugar de tener el coraje de explorar nuevas herramientas, imaginar nuevos procedimientos y romper moldes. ¿Seguimos en las Tecnologías de la Información preparándonos para ganar la pasada guerra, en lugar de imagiinar la siguiente?.
Esto es realmente curioso y con un potencial que ni alcanzo a ver.
Que un sargento bregado en el fregado pueda explicar o detallar cómo hizo una operación de tal o cual tipo puede ser muy interesante ¿no?