Para muchos de los que han pasado de la fotografía ‘quimica’ (negativo+revelado+positivado) a la digital, las transformaciones de la imagen que hay que realizar después del disparo suponen una dificultad. No todo aquel que se desempeñaba bien con la cámara o incluso col los líquidos de revelado y la ampliadora tiene una buena relación con los ordenadores.
A pesar de que la tendencia es a que los programas sean cada vez más sencillos y amigables, el panorama de la creación de imágenes fotográficas ha cambiado de forma tan radical que es normal que haya aficionados que se encuentren despistados. Aunque hay muchos libros con conceptos básicos y otros avanzados sobre temas específicos, me reafirmo en mi opinión antigua de que «ningún libro lo cuenta todo» y aún me atrevo a recomendar sin cargo adicional otro principio que extraje de mi experiencia: «para desempeñarse medianamente en un tema informático son necesarios, al menos, tres libros diferentes«. Al precio que andan hoy los libros eso supone una inversión.
Una opción interesante para ahorrar en libros, en tiempo e incluso a veces en lectura de manuales son los amigos. Saquear el caudal de conocimiento de un experto es , sin duda, el método de aprendizaje más eficaz y si en un abuso claro de amistad la transferencia de conocimiento es gratuita -se admite como gratuita que le invites a unas cañas, no seas rata…- pues tanto mejor.
Eso es lo que yo he hecho, andar preguntando y pidiendo opinión a unos y a otros. Berta Zea es profesional de la fotografía y socia de Aire, me recomendó recientemente esta secuencia de retoque básico:
- Reencuadrar (recortando)
- Analizar la curva tonal y ‘sombras-luces’ y ponerla lo mas equilibrada posible. la propia vista te lo va diciendo.
- Contrastar
- Dar algo de saturación si la imagen lo requiere
- Enfocar más o al contrario
Según Berta, «es fundamental seguir este orden«. Yo añadiria de mi cosecha en el punto 1), incluir el giro de la imagen hasta que el horizonte queda vertical. Berta, te debo esa caña.
Esta entrada es de la que te dejan pensando en si sigues la misma pauta por qu eloleiste en algun sitio o te aplicaste tu propia logica para seguir la misma pauta.
Una vez aprendes que la mascara de enfoque se debe de aplicar cuando ya tienes el resto de la foto apañada, lo demas cae por su propio peso.
-Si vas a recortar, ¿tendria algun sentido ajustar luces incluyendo partes de la imagen que vas a eliminar y que te van a falsear el balance de luces general ?
-Si corriges canales ¿tiene algun sentido aplicar antes un balance de brillos y contrastes que se aplica por igual a todos los canales sin corregir?.
Pues eso, puro sentido comun.
A mi me pasa algo parecido, pero se la respuesta a la primera pregunta: Lo deduje, y me costó un tiempo, así que ahí queda por si a alguno le ahorra ese tiempo en probar y deducir. :-)