Tengo la costumbre de escribir en un cuaderno. Todo empezó para usar las estilográficas que tenía entintadas y que no se secasen. Cada pocos días escribía una o dos líneas con cada pluma. Me cansé de escribir «Prueba de la pluma Lamy safari vista con plumín F y tinta…» y empecé a escribir cualquier cosa que me pasase por la mente. Los escritos de aquella época son bastante caóticos. Por mi mente pasan cosas muy absurdas y pensamientos muy profundos con la misma facilidad, y yo escribía sin freno.
El caso es que de alguna manera la cosa fue derivando a pensamientos más ordenados, reflejo de mi estado de ánimo y un relato de los sucesos relevantes -para mí y mi estado de ánimo- ocurridos en los días que escribía y en los anteriores. No soy muy regular, hay días que no escribo, pero escribo frecuentemente entre tres y seis páginas. A ese ritmo me he comido ya un número indeterminado de cuadernos, pero creo que más de seis. Como la cosa empezó como «pruebas de plumas», no los numeré y hay cuadernos con orígenes diversos en los que aproveché las últimas páginas. En fin, todo es un poco caótico. Hace tres cuadernos empecé a escribir en unos cuadernos de propaganda. Y resultó que el papel es excelente para escribir con pluma. Pero claro, todo se acaba. Ya solo me quedan dos hojas del último cuaderno. El patrocinador no tiene planes de hacer más y no tengo ni idea de dónde o a quién se los compró. Una de las dos hojas que quedan la voy a usar como muestra para peregrinar por papelerías de prestigio a ver si alguien tiene algo parecido. Si pudiera comprar papel de este cortado a 34×22 con la fibra en el sentido más corto de la hoja, haría acopio para hacerme mis propios cuadernos.
Pero supongo que eso no lo encontraré ni en un día ni en una semana. Así que tengo que volver a tirar de la reserva de cuadernos. Como dibujo en cuadernos, me han regalado muchos a lo largo de los años. De diversos tipos. Tengo cuadernos para dibujar y cuadernos para escribir. De estos últimos, muchos son realmente malos, con papelín de 70 g que al primer toque de la pluma traspasa la hoja y casi mancha la página de debajo, en absoluto aptos para su uso con pluma estilográfica. Me he planteado incluso escribir con bolígrafo.
El Zebra ‘Sarasa’ Vintage que tengo, con tinta de un precioso ‘azul lago’ es agradable de usar y tengo diez cargas de repuesto, pero, … no es lo mismo. La otra es usar los cuadernos solo por una cara de la hoja. No sé si me convence. La vista de la tinta traspasando la hoja de la izquierda creo que perturbaría la concentración y alteraría la paz de espíritu que necesito para que la escritura fluya adecuadamente.
Entre los cuadernos que tengo hay un Leuchtturm1917 tamaño A5 sin estrenar al que tengo especial cariño porque me lo regaló un amigo y está personalizado con mi nombre. Pero me da la impresión de que no se va a llevar muy bien con la pluma. ¿Alguien tiene experiencia con estos cuadernos y la escritura con pluma? Agradecería comentarios si alguien tiene experiencia con este cuaderno.
Obviamente, no hay problema que no se arregle con dinero. A 20 euros el cuaderno seguro que encuentro maravillas, pero no es ese tipo de solución la que busco. También he visto en la gran tienda china de internet una variedad inmensa de cuadernos, algunos de ellos son chollos, al menos en apariencia, pero también supone un riesgo «comprar sin tocar» y no tengo ganas de meterme en esa jungla oriental. en todo caso recurriría al chino local. En establecimientos de material de importación he encontrado auténticas joyas, pero lo malo que eso pasa una vez y jamás de los jamases vuelves a encontrar el producto en la estantería. En fin, estoy sumido en un dilema y no sé para dónde tirar. Agradecería opiniones sobre el Leuchtturm1917. Si lo empiezo y la cago, no quiero tener la sensación de haber «estropeado» el cuaderno. Podéis responderme a través de Mastodon o en mi correo electrónico.