El método Zeditas
Cada día para desayunar Mercedes hacía unos bollos o madalenas, segun se quiera llamar, que contenían la cantidad de salvado que hay que comer al dia y que no llevan harina. No son una receta, sino varias porque los ha hecho con multiples variaciones y sabores: Cacao y avellanas o Limón, canela y especias otras docenas de sabores. Yo tomaba dos en casa con el cafe, me llevaba uno al trabajo donde me lo tomaba con el cafe de media mañana y muchos días tomaba otro a media tarde con un vaso de infusion o té.
En el cuartel siempre me ha preocupado lo que se come y siempre he pasado por la cocina o he comido en el comedor para comprobar que el nivel no decae, lo cual entra dentro del ámbito de mis responsabilidades. El personal de cocina es muy profesional y aprecian realmente su trabajo y el hecho de que sea una unidad muy pequeña creo que hace que pueda decir que se come bastante bien. Pero tiene un inconveniente para la dieta y es que la minuta suele ser hipercalórica, así que uno de los puntos de atención fué no comer nada en el trabajo que se saliera de la dieta. Solo comía algo si no contenía grasas, hidratos de carbono o azucar. Comer algo me servía para no desfallecer antes de llegar a casa y comer de verdad. Sin que yo comenbtase nada, pronto se dieron cuenta de cuales eran ms hábitos y directamente soloo me ofrecían de lo que comía habitualmente. Por otra parte en los primeros meses perdía a razón de un kilo o dos por semana y eso empezó a notarse pronto, asi que el hecho de que estaba a dieta era evidente aunque yo hablaba poco de ello.
En casa las comidas, como digo, eran bastante variadas y el tema de picar entre horas lo tenía resuelto con las salchichas de pavo (y condimento, como mostaza o salsa picante) y los bollos de salvado con infusiones. Además he comido bastantes caramelos sin azucar y litros y litros de agua. Sin embargo yo mismo me he extrañado porque frecuentemente me molesta que haya cosas «a mano» que yo no pueda comer, como chocolate, patatas fritas, …esta vez ha habido todas esas cosas en casa y no me han interesado, ni siquiera me ha costado esfuerzo evitar comerlas. Me consta que todo está relacionado con la decisión de perder peso y no hacer un esfuerzo para nada.
Todos los viernes tenemos la costumbre de irnos de tapas con nuestros vecinos y amigos. Solemos ir a un bar gallego con una cocina estupenda. Nuestra costumbr de tapas no decayó, solo que yo no bebía cerveza sino agua y solía tomar unas pastillas de chitosán que evitan la asimilación de las grasas.
En los restaurantes no es difícil encontrar platos que sean carne a la brasa con algunas verduras, algo sencillo y suculento que permite comer sin dar demasiadas explicaciones sobre si haces dieta o no.
Odio escribir esto, pero ….(Continuará) (Parte II de III)
Un año a dieta. Parte III
Un año a dieta. Parte I
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