Buscaba un texto que explicase claramente tanto el modelo económico como la evolución histórica del fenómeno de las ‘Low Cost Companies (LCC) y tengo que confesar que compré «Cielos Baratos, Historia y presente de las Low Cost» con algún reparo debido a la austeridad de la edición dudando sobre si seria el libro que buscaba. Pero no me pareció caro y decidí arriesgarme. La decisión fué acertada. Tras la sencillez de la edición hay una gran obra.
Según me dijo después un amigo argentino, su autor, Alejo Marcigliano «es uno de los tres mejores periodistas argentinos de aviación«. Si no estuviera asi de bien referenciado, solo con este libro podría calificarlo como un gran autor. Su estructura es clara y la exposición del tema organizada y pletórica de cifras datos y referencias a las fuentes. Es a la vez un trabajo claro, serio y ameno, con un equilibrio difícil de conseguir en cualquier tema y que interesará no solo a especialistas en aviación, turismo, economía sino también a cualquier aficionado o al público en general ya que se trata de un tema de actualidad sobre el que pocas veces tenemos ocasión de acceder a información tan bien fundamentada.
Alejo, periodista de profesión, lleva dieciocho años cubriendo las noticias de aviación y se confiesa «un fan de la aviación de chiquito, un ‘fierrero’ como se dice...» (Lo de «fierrero» debe ser en argentino, una variante del aerotrastorno dedicada a «los más pesados que el aire»). «Cielos baratos» es su primer libro y actualmente está trabajando en una nueva obra.
Aunque los datos económicos y estadísticos son los disponibles en la fecha de publicacion del libro y en aviación todo evoluciona muy deprisa, al lector interesado no le será difícil buscar en las fuentes mencionadas la actualización de los mismos.
Las compañías «Low cost, low fare» (Costes bajos, tarifas baratas) han revolucionado el mercado de la aviación. Quizás la razón principal es que su éxito no se basa en un traspaso de clientes desde las compañías tradicionales sino en el incremento de viajeros que han propiciado ya que hay mucha gente que si no fuera por la disponibilidad de vuelos baratos, no volaría.
Su modelo, criticado a veces sin conocerlo, se basa en la reducción de costes laborales mediante una optimización del personal al que a veces se le pide que realice varias funciones, La estandarización de la flota formada por aviones nuevos sin problemas de mantenimiento derivados del envejecimiento, la reducción de tasas, usando aeropuertos secundarios y minimizando el uso de sus servicios y el tiempo de escala, realizando conexiones punto a punto en recorridos cortos o medios (de una o dos horas de vuelo) en rutas muy solicitadas sobre las que se han hecho intensos estudios de mercado y aplicando medidas de ahorro de combustible.
Son muchas las acusaciones que se les hace, sobre todo desde el mundo de las aerolíneas tradicionales que ven amenazada su parte del pastel y los beneficios de ‘los tiempos gloriosos’ que no volverán porque el pasado nunca regresa, y que tras el éxito del modelo, se apresuran a imitarlo.
En el terreno de la anécdota y desde un punto de vista europeo, yo creo que no hay que confundir el modelo de las LCC con las gracias de algún payaso irlandés.
Quizás la principal conclusión del libro es que los modelos se difuminan y hoy quedan pocas compañías de bajo costo clásicas, que siguen el modelo a rajatabla. Hoy domina más bien un modelo mixto, con elementos compartidos. Y en el futuro próximo, las LCC que han explotado el potencial de la innovación deberán reinventarse y tratar de seguir sorprendiendo y cautivando a los clientes, ofreciendo además de precios competitivos, beneficios diferenciadores de la competencia.
Pingback: Bitacoras.com