A través del Museu de la Técnica de l’Empordà que había sido invitado, Juan Jesús me ofreció la posibilidad de asistir el pasado día 25 en Viladecans, en la sede del CTAE (Centre Tecnològic per a la Indústria Aeronà utica i de l’Espai) a un acto conmemorativo del cuarto aniversario de su constitución. Fuimos los dos hasta Barcelona y sin duda el viaje mereció la pena.
El acto consistió en una serie de presentaciones cuyo único defecto fue estar hechas casi a contrareloj, aunque si no hubiera sido así le habríamos sacado el defecto de durar excesivamente. Este aparente contrasentido se produce por el hecho de que todo lo que alli se dijo me pareció interesante.
Después de los parlamentos de Carles Ruiz Alcalde de Viladecans y Fernando de Caralt, presidente del patronato del CTAE, se desarrollaron las presentaciones. Divididas en cuatro grupos, trataban de las áreas principales de actividad del CTAE y fueron conducidas por algunos de sus responsables.
Vuelos espaciales tripulados estuvo dedicado sobre todo a proyectos de investigación sobre sistemas de soporte de vida.
Interiores aeroespaciales nos mostró como la industria auxiliar de la automovilística puede serlo también de la aeronáutica y espacial convirtiendo el confort en un factor diferencial entre diferentes operadores aéreos.
Robótica, automática avanzada y vehículos aéreos no tripulados confirmó mi impresión sobre el enorme auge que van a tener los UAV en multitud de aplicaciones civiles.
En Observación de la tierra y aplicaciones radar tuve ocasión de conocer una serie de interesantisimos proyectos sobre el uso convenientemente procesadas de imágenes obtenidas con radar de apertura sintética.
Por último en Navegación y posicionamiento conocer algunos de los proyectos relacionados con el sistema de posicionamiento europeo Galileo nos hizo comprender el amplio mercado que surge más allá de la simple aplicación del posicionamiento para navegación y la importancia que tiene ser no solo el usuario, sino el generador de toda esa tecnología.
Llegados a ese punto se pasó a realizar un alto para tomar un café y debido a la necesidad de no llegar muy tarde a Figueres, no pudimos quedarnos a la mesa redonda sobre transferencia de tecnología y conocimiento, quedando a la espera de que se publiquen las sin duda interesantes conclusiones.