En el Blog de Francisco Javier Moya Suárez, «…hmmm…» apareció un post titulado «Lo que piensan los españoles de los inmigrantes«. En él se pone de relieve que en la calle hay mucha gente que dice auténticas barbaridades, en este caso sobre los inmigrantes. No le ha hecho falta explicarlo mucho, porque los comentarios hablan por si solos. Es dificil encontrar, salvo en algunos grupos de noticias una colección tan extensa de sandeces. A mi me interesa el tema y he intentado hacer una aportación.
En un contexto normal cabria esperar algún insulto u opinión radical, pero creo que he escrito demasiadas letras y los que escriben los otros comentarios no parece que estén por la tarea de leer tanto. En cualquier caso lo dejo aqui porque la inmigración es algo con lo que no es que tengamos que aprender a convivir, es que es una parte de nuestra realidad. El mundo sin inmigrantes ya no existe ni va a volver a existir. Mi comentario:
Los movimientos de población han existido siempre y son la base de la mayoría de las culturas. Desde los Neardentales a los fenicios, cartagineses celtas, romanos, y muchos otros grupos en eras más recientes, por España, tierra de paso, ha venido de todo. La emigración NO es una cosa nueva.
La emigración es un conflicto de clases, los que vienen son pobres y para explotarlos aún mas la clase pudiente atiza a las clases humildes autóctonas contra ellos achacándoles los males sociales y aprovechando el principio del miedo a lo desconocido-diferente.
En la inmigración en el mundo moderno subyace otro conflicto: mientras se admite el derecho de los recién llegados a conservar sus raíces, se desea que se integren y se respeten las propias, que solo son el resultado de otros mestizajes anteriores.
La fiesta mas concurrida de Catalunya es la feria de Abril, una manifestación de cultura foránea. Figueres, se considera ‘ciudad madre de la Sardana’ porque en ella compuso, hace menos de 150 años, las primeras obras de este género Pep Ventura, nacido en Jaén y cuyo padre era militar en esta población. Por otra parte Figueres ha adoptado una expresión folclórica propia de otro lugar de Catalunya: Los castillos humanos que nacieron en la zona de Valls, en Tarragona y cuyo exponente más visible, «l’aixeneta», el niño que sube hasta la cima para coronar una torre, es en la peña figuerense una preciosa y jovencísima niña de color (negro).
Asi que, amad a los que vienen porque ellos nos enriquecen y el futuro, como el pasado, es mestizo.